El Gobierno convocó a una nueva reunión paritaria, la tercera -la primera fue el viernes 19; la segunda, el lunes 22-, para este martes a las 17 en la Secretaría de Trabajo en la que está previsto que se dé a conocer una nueva oferta salarial a los docentes.
Extraoficialmente, se supo que el Ejecutivo hará una nueva presentación, que incluirá suma en negro, y que será levemente superior a la conocida el lunes 22: un 5% para julio, igual porcentaje a la inflación para agosto y una suma fija de $120 mil en tres cuotas, más la mejora del mínimo garantizado para el docente, de $379 mil a $418 mil.
Pero esa convocatoria no cambiará la situación del conflicto de los docentes: el paro de 48 horas previsto para jueves 1º de agosto y viernes 2 de agosto.
El congreso de la Asociación Gremial del Magisterio de Entre Ríos (Agmer) que se reunió el miércoles en San Salvador consideró esa oferta como «insuficiente, distorsiva e inconstitucional» y dispuso la aplicación de cuatro jornadas de paro: el 1º, el 2, el 6 y el 7 de agosto. La respuesta sindical a la propuesta salarial derivó en la decisión de no pagar ningún componente de la propuesta paritaria, que sí llegará al bolsillo de los estatales por cuanto la Unión del Personal Civil de la Nación (UPCN) y la Asociación Trabajadores del Estado (ATE) aceptaron la oferta.
«Esto ha ocurrido muchas veces -analizó Guillermo Zampedri, secretario gremial de Agmer-. Ante cada rechazo a una oferta, los gobiernos de turno, a modo de presión, eligen no pagar la propuesta presentada. Es parte del juego. Nosotros entendemos que en algún momento esa pauta se pagará cuando encontremos un acuerdo. Cuando el Gobierno plantee una pauta que esté más cercana a lo que necesita el docente, seguramente se acordará».
El dirigente gremial señaló: «Nosotros planteamos cuatro cuestiones centrales. Primero, que se reconozca el desfase entre inflación y pauta salarial. Es cierto que es difícil ponernos de acuerdo en el número. Nosotros entendemos que hay que discutir ese número, y llegar a un acuerdo. No está en esta oferta eso. EL Gobierno manifestó voluntad política de reconocerlo. Pero luego se esfumó y no estuvo en la oferta. El segundo tema es que toda oferta salarial no puede tener sumas no remunerativas y no puede excluir a los jubilados El tercer planteo que hacemos es que no hay problema que la pauta sea bimestral, el tema es que debe respetar el proceso inflacionario. La propuesta del Gobierno no respeta el proceso inflacionario, claramente la inflación había sido 4,6% en junio, y el Gobierno pone 5% de recomposición, pero aumentar el 3% el aporte jubilatorio. Entonces, queda un poco menos que 2%. En el cuarto punto, sobre lo cual el Gobierno había dado parcial respuesta, tiene que ver con el aumento del salario mínimo inicial del cargo testigo, hoy en $379 mil. Se lo lleva a ese monto a $418 mil. Nosotros entendemos que debe ser elevado un poco más».