Cuando estamos en medio de una crisis, es fácil caer en la desesperación y hasta podemos sentir una opresión en el pecho que pareciera no tener fin. En ese momento, los pensamientos negativos nos inundan. Nos sentimos atrapados en una espiral de ansiedad y preocupación que nos hace perder la perspectiva de lo que realmente importa en la vida.
Es como si nos hubieran arrojado al medio de una tormenta sin protección alguna. No sabemos cómo salir de ahí y tenemos la firme convicción de que no seremos capaces de superar la situación.
Es tan importante desarrollar la habilidad para transformar un momento desafiante, difícil, en un momento de crecimiento y oportunidad.
Porque una vez que tenés esa habilidad, en lugar de dejar que la crisis te consuma, vas a tomar medidas para afrontarla y transformarla.
Ver las crisis como una oportunidad de crecimiento y aprendizaje, depende de la interpretación que le des a ese momento. Depende de cómo y cuánto te hayas entrenado para eso. Depende de tus herramientas internas.
Te animo a practicar esta nueva mirada, a pensar en las crisis como una oportunidad, cómo un momento que te permitirá crecer y avanzar al siguiente nivel en tu vida.
Sé que no es fácil pero… vale la pena!!
Como seres humanos, tenemos una capacidad infinita para adaptarnos a las circunstancias y aprender de nuestras experiencias.
¿Conocés a la famosa y exitosa J.K. Rowling? La escritora de Harry Potter…
Resulta que, antes de ser una de las mujeres más exitosas del mundo, otra era su realidad: recibió maltratos en su primer embarazo, fué madre soltera, dependía del estado para poder comer, vivía en un departamento lleno de ratas, y aún así escribió su novela. Pero la historia no terminó ahí: 11 editoriales rechazaron su trabajo y no le alcanzaba el dinero para imprimir su manuscrito por lo que tenía que escribirlo de nuevo cada vez que lo presentaba.
¿Que la impulsó? ¿Que transformó esa situación de pobreza, depresión, soledad y fracaso en el éxito que tiene hoy?
En un discurso en Harvard, Rowlin dijo (entre muchas otras cosas): «El fracaso me enseñó más que la universidad».
Expresó que el fracaso le permitió descubrir cosas de ella misma que jamás hubiera descubierto en una situación de comodidad.
Entonces si estas pasando por un momento de fracaso, si tu emprendimiento no está dando los resultados que querías, si sentís que nada te funciona o que «nada puede ir peor»… justo esta crisis puede ser la puerta a un nuevo impulso. La oportunidad que saque tu mejor versión. Y ser capaz de notar esto depende exclusivamente de tu perspectiva.
Por eso te voy a dejar 5 claves para que te entrenes en el cambio de perspectiva.
1- Aceptar y Elegir
Tomá la decisión de transitar las crisis como una oportunidad. Reconocé los sentimientos negativos que surgen en una crisis y aceptalos. Ser consciente de esas emociones puede ayudarte a liberar la tensión y a abrir la mente para explorar soluciones. Si te permitís inhalar profundo y lento ya vas a estar entrando en otra frecuencia vibracional diferente, te va a permitir ser más consciente del poder de ELEGIR cómo responder ante esa situación que estás viviendo.
Recordá que, aunque no podés controlar todo lo que te pasa, sí podés controlar cómo reaccionar ante las circunstancias. Podés elegir enfocarte en el lado negativo de las cosas o buscar la oportunidad que te brinda cada crisis para crecer y aprender.
Y sobre todo, recordá que las crisis no te definen. Son oportunidades disfrazadas y si vos cambias la perspectiva vas a poder recibir ese regalo, esa oportunidad de aprendizaje, ese crecimiento al que te invita la crisis.
2- Nutrí tu mente
Lee, escucha, mirá contenidos que te nutran, alguien de quien puedas aprender. Frecuentá a personas que te llenen de buena energía, alejate de la crítica y la negatividad.
3- Activá tu cuerpo
Movete, aunque no tengas ganas. Necesitas tomarte ese momento. Salí, hacé ejercicio, caminá, bailá, hacé algo que te haga sentir vivo/a y te ayude a liberar la tensión acumulada. Tu cuerpo y tu mente están conectados, por lo que si te moves, también vas a mejorar tus pensamientos, vas a liberar endorfinas y eso te sacará del malestar mucho más rápido.
4- Mejorá tu lenguaje interno.
Cambiá la historia. Dejá de decirte «esto me está matando» y empezá a decirte «qué momento más desafiante». Enfocate en las cosas positivas que tenés en tu vida y en lo que podes hacer para cambiar la situación actual. Dejá de hablar de lo mal que estás y enfocate en lo positivo que tenés en tu vida.
Y cómo sé que esto puede resultar complicado, aquí te dejo algunas preguntas para practicar mejorar tu lenguaje interno: Preguntate a vos mismo: ¿Qué puedo aprender de esta situación? ¿Cómo puedo crecer a partir de esto? ¿Qué opciones tengo que no había considerado antes?
5- Ayuda a alguien.
Puede ser algo tan simple como hacer una llamada a un amigo que necesita compañía o hacer una donación a una organización benéfica. Ayudar a otros te ayudará a sentirte mejor y cambiar tu perspectiva.
Entonces, aunque ahora mismo sientas que estás en medio de una tormenta, recordá que siempre hay una salida (y si no me crees, hacé memoria. Pensá en todas esas veces que creíste que no ibas a poder recuperarte y acá estás…). Busca la fuerza en tu interior para enfrentar los desafíos, activa tu cuerpo y mente, cultivá un lenguaje interno positivo y ayuda a los demás.
Hacé crecer la confianza en tu capacidad para enfrentarte a los desafíos de la vida, vas a ver cómo en breve todo comienza a aclarar.
Cómo dijo Albert Einstein: «En medio de la dificultad yace la oportunidad»
Te abrazo. Nati.